Descubre las emblemáticas locaciones de 'Las Hermanas Guerra' en Durango

A tan solo una semana de su estreno, la nueva serie de Netflix, Las Hermanas Guerra, acaparó la atención del público y ocupa los primeros lugares en el top de la plataforma. Esta serie, que narra el drama familiar de las hermanas Perla y Antonia Guerra, ha destacado no solo por su trama sino por elección de sus locaciones para su grabación en el estado de Durango, México. 

Con la participación protagónica de Claudia Álvarez y Ana Serradilla, esta producción ha logrado posicionarse entre las tres series más vistas en México, y también ha generado un especial interés por involucrar a muchos duranguenses tanto frente como detrás de cámaras.

Conoce las locaciones de Las Hermanas Guerra

Durante 10 semanas, Durango fue el escenario principal para esta filmación realizada entre marzo y mayo de 2024, y el equipo de producción eligió  puntos emblemáticos del estado.

1. Ricardo Flores Magón

Esta localidad ubicada en el municipio de Canatlán, fue elegida por sus hermosos paisajes naturales con desiertos y montañas, además posee el volcán inactivo El Jagüey, que sirvió de fondo para algunas escenas.

2. Centro Histórico de Durango

Sus calles empedradas y arquitectura colonial, fueron el escenario perfecto para ambientar las intrigas y dramas de las hermanas Guerra. La Catedral de la Inmaculada Concepción y la Casa del Conde del Valle de Súchil se filmaron en la serie.

3. Otras locaciones en Durango como Chupaderos, Nombre de Dios, Cuencamé y Hacienda de Dolores también sirvieron para el rodaje de la serie en su primera temporada.

Durango se conoce como la tierra del cine

No fue casualidad que el equipo de producción eligiera a Durango como escenario principal para Las Hermanas Guerra, pues, este estado es conocido como “la tierra del cine,” y es que gracias a su diversidad geográfica y arquitectura ha sido el espacio para filmar un buen número de producciones nacionales e internacionales.

Con su inclusión en las opciones de Netflix, esta serie no solo celebra el talento local y coloca a las historias mexicanas en un escenario que traspasa fronteras, sino que además posiciona a Durango como un referente cultural y del cine.