SNAP, Beneficios extra de verano: quién califica, cuánto recibe y cómo solicitar el cheque

Cada mes, los estados de todo Estados Unidos realizan el crucial desembolso de beneficios del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP, siglas en inglés). Estos beneficios se transfieren mensualmente a una tarjeta electrónica de transferencia de beneficios (EBT), que opera como una tarjeta de débito, facilitando así la compra de alimentos en establecimientos autorizados. Los montos variarán según el número de integrantes del hogar, pero durante el verano, algunas familias podrán recibir un apoyo adicional.

El programa Summer EBT ha sido una bendición para muchas familias, ya que les permite acceder a más recursos durante la época estival para cubrir los gastos de alimentación de los niños, quienes pierden el acceso a las comidas escolares gratuitas proporcionadas por el Programa Nacional de Almuerzos Escolares (NSLP) y el Programa de Desayunos Escolares (SBP).

¿Cómo acceder a los beneficios adicionales de SNAP durante el verano?

Según el Servicio de Alimentación y Nutrición, a partir del verano de 2024, las familias podrán recibir U$D 40 adicionales por niño elegible, mensualmente, durante julio y agosto, mediante una tarjeta prepagada. La elegibilidad de los niños es automática si cumplen con ciertos criterios.

Sin embargo, para aquellos que no los cumplen, es necesario enviar una solicitud para acceder a las comidas escolares. Aunque no existe una fecha límite específica para solicitar estos beneficios, se recomienda hacerlo lo antes posible para evitar complicaciones.

Las solicitudes están disponibles en línea a través de los sitios web de los distritos escolares correspondientes. Para aquellos que prefieren realizar la solicitud en persona, pueden ubicar el sitio de comidas de verano más cercano a través de un buscador especializado. Además, existe la opción de enviar un mensaje de texto con la frase “Summer Meals” al 914-342-7744 o llamar al 1-866-348-6479 para encontrar un sitio de distribución cercano.

En un esfuerzo por garantizar que ningún niño pase hambre durante el receso escolar, este programa ofrece un importante respaldo para las familias que enfrentan dificultades económicas, asegurando que los pequeños tengan acceso a comidas nutritivas durante todo el año.