EE.UU.: ICE usaría cámaras locales para rastrear inmigrantes sin autorización directa

A pesar de no tener contratos formales con la empresa Flock Safety, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) ha encontrado una manera de acceder a su red de lectores automáticos de matrículas (ALPR).

Según una investigación de 404 Media, ICE se vale de agencias policiales locales para solicitar búsquedas en la red de cámaras de Flock, eludiendo así las restricciones que existen en muchos estados para evitar que esta tecnología se use con fines migratorios.

Esta maniobra encendió las alarmas entre expertos en vigilancia, ya que se descubrió que más de 4 000 búsquedas relacionadas con inmigración fueron realizadas en solo un año. “ICE está abusando de los sistemas de vigilancia locales mediante un atajo legal. Es una clara extralimitación”, advirtió un vocero de la investigación, que decidió mantenerse en el anonimato por temor a represalias.

Búsquedas “informales” con objetivos migratorios

La información obtenida a través de solicitudes públicas de registros al Departamento de Policía de Danville, Illinois, revela que múltiples departamentos policiales en EE.UU. realizaron búsquedas en Flock con términos como “ICE”, “ICE+ERO”, “inmigración ilegal” y “orden de ICE”.

Incluso cuando no existe un contrato formal con la agencia, estas búsquedas permiten a ICE acceder indirectamente a datos que de otro modo le estarían restringidos. Según 404 Media “aunque las búsquedas relacionadas con ICE ocurrieron durante las administraciones de Biden y Trump, todas las que mencionaban explícitamente ‘inmigración’ se hicieron después de la inauguración de Trump”.

Preocupaciones por la falta de transparencia y rendición de cuentas

El uso de esta red, que originalmente fue promocionada como una solución para delitos locales como robos de autos o búsqueda de personas desaparecidas, ahora genera preocupaciones sobre la privacidad y los derechos civiles.

Activistas y defensores de los inmigrantes exigen que se detenga esta práctica. “Es hora de impedir que ICE abuse de los sistemas de vigilancia locales”, concluye el informe.