En Los Ángeles, este mobiliario urbano fue reutilizado como escudo durante las protestas masivas contra las redadas migratorias de Trump.
Las protestas que han sacudido el centro de Los Ángeles esta semana no solo han marcado un momento político de alta tensión en EE.UU., sino también un inesperado símbolo de resistencia: los bancos rosas de Grand Park. Estas estructuras, originalmente instaladas como piezas de arte urbano inclusivo, se convirtieron en herramientas improvisadas de defensa por parte de los manifestantes.
Durante las manifestaciones “No Kings”, impulsadas por la reactivación de redadas de ICE bajo órdenes del presidente Trump, los participantes alzaron los bancos para protegerse de gases lacrimógenos y proyectiles policiales. Las imágenes se viralizaron rápidamente y el símbolo pacífico adquirió una nueva connotación de protesta cívica.
Te recomendamos
Un mobiliario que mutó en escudo urbano
Diseñadas inicialmente para fomentar el descanso, la equidad y la diversidad, las bancas de color rosa de Grand Park fueron creadas en colaboración con artistas locales. Sin embargo, los manifestantes reinterpretaron su uso cuando la confrontación se intensificó entre civiles y fuerzas del orden. Videos muestran cómo las bancas fueron trasladadas y alineadas como barricadas para frenar el avance de la policía.
Este fenómeno, aunque espontáneo, evidencia cómo los espacios públicos en EE.UU. están siendo resignificados frente a políticas percibidas como represivas. En cuestión de horas, lo que era parte del paisaje urbano se convirtió en símbolo visual de la lucha por los derechos civiles.
La ciudad de Los Ángeles responde con cautela
Funcionarios del condado han manifestado su preocupación por los daños al mobiliario urbano, pero también reconocen la carga simbólica del hecho. La alcaldesa Karen Bass, en declaraciones posteriores, evitó condenar a los manifestantes y pidió una evaluación "proporcional" de los hechos. Grupos de derechos humanos han solicitado que no se presenten cargos por el uso de los bancos.
Mientras tanto, organizaciones artísticas y vecinales se han unido para proponer que algunas de estas bancas queden como recordatorio permanente de la resistencia civil en EE.UU. frente a las decisiones del gobierno federal.
No solo buscan oro: Minería ilegal de cobre avanza en el sur del país
La minería ilegal de cobre, una actividad que durante años se mantuvo fuera del foco mediático, hoy comienza a mostrar sus efectos más preocupantes. No solo afecta operaciones formales, sino que también avanza nuevas inversiones, el medio ambiente y la seguridad de las personas, especialmente en el sur del país. Conoce más sobre esta problemática en el siguiente informe de RPP en colaboración con el Instituto Peruano de Economía (IPE).
Comparte esta noticia
Siguenos en