8 consejos para armar tu PC gamer y sobrevivir en el intento

Llegó el momento de armar tu PC gamer y…. hay muchas variantes que tienes que tomar en cuenta. Nuevas tecnologías, siglas que no reconoces y demás. Estos consejos te ayudarán a que tengas la computadora que necesitas.

1. Fíjate en la compatibilidad

Hay varios aspectos para tomar en cuenta cuando decides armar tu PC. El gabinete o case, la placa madre, procesador y RAM deben ser compatibles.

Herramientas en línea como PC Part Picker te permiten listar los componentes que utilizarás en tu PC y te indicarán si hay algún problema de compatibilidad.

 

2. No gastes de más en el procesador

Hay que matar el mito que una PC gamer debe tener al menos un Intel Core i7 o un Ryzen 7.

Es cierto que conseguirás un mejor rendimiento con procesadores de gama alta, pero este no será dramático. Si solo quieres jugar, es mejor invertir en una mejor tarjeta de video.

Tanto los Intel Core i5 de 13ª generación como los Ryzen 5 de la serie Ryzen 7000 ofrecen un muy buen rendimiento.

Si utilizas la PC para más tareas como la edición de videos o tareas computacionales exigentes, es mucho más lógico optar por un procesador de gama alta, que te dará más núcleos.

3. Escoge una tarjeta de video de acuerdo con tus necesidades

Al escoger una tarjeta de video, tienes que considerar qué juegos quieres correr y en qué resolución.

Por ejemplo, no necesitarás la mejor tarjeta si quieres jugar Dota 2 en un monitor full HD, pero sí si buscas correr Cyberpunk 2077 en 4K.

Te puedes guiar de los requerimientos recomendados de los juegos que buscas correr.

En el caso de NVIDIA, las tarjetas RTX cuentan con soporte para Ray Tracing y DLSS, que brinda más cuadros por segundo en juegos compatibles.

AMD empezó a implementar Ray Tracing desde la serie RX 6000, con un mejor desempeño en sus RX 7000. En estas tarjetas puedes utilizar FSR, un equivalente a DLSS que también es compatible con tarjetas de NVIDIA.

Intel ha comenzado su camino en las tarjetas de video con resultados mixtos.

4. No debes tener la placa más cara

La placa madre es muy importante y evidentemente tiene que ser compatible con tu procesador y RAM.

Las placas más caras tienen características pensadas para usuarios avanzados o para aquellos que hacen overclock.

Lo importante es que la placa sea compatible y que tenga las características que necesitas. No te dejes llevar por el RGB.

5. El enfriamiento líquido no es la única solución

Algunos procesadores vienen con un disipador en la caja, pero es recomendable utilizar otra opción.

Los disipadores de aire suelen ser más baratos y tener menos riesgo a fallar.

El enfriamiento líquido se ve bien y es más recomendable si usas un procesador de alta gama.

6. Es mejor no ahorrar en la fuente de poder

Cuida tu inversión con una fuente de poder certificada y de una buena marca.

Te dejamos una lista con fuentes de poder clasificadas por varios usuarios.

Tier A significa alta gama, con fuentes recomendadas para sistemas de usuarios exigentes.

Tier B es gama media, que te dará buenas opciones para una PC gamer promedio.

Tier C tiene modelos recomendados para PC más modesta con tarjeta de video.

También es recomendable comprar una fuente de poder que te brinde un poco más de poder del que necesita tu sistema. Así no tendrás que cambiarla por si mejoras tu tarjeta de video en el futuro.

¿De cuánto tiene que ser tu fuente de poder? Esta herramienta te permite hacer un cálculo de lo mínimo que necesitarás.

7. Sácale provecho a tu RAM

Se recomienda contar con dos módulos de RAM en vez de uno para aprovechar el llamado “dual-channel” y sacar el mejor rendimiento de tu sistema.

A su vez, activar el “overclocking” de la RAM. Este puede ser llamado XMP, D.O.C.P o EXPO, dependiendo de tu procesador y placa. Se activa desde la BIOS.

8. Dile adiós al disco duro para el sistema operativo

Ya en 2023, te castigarás si alojas tu sistema operativo en un disco duro tradicional.

Un SSD SATA o un NVMe te darán arranques más rápidos.

La mayoría de los juegos todavía no le sacan provecho a altas velocidades de almacenamiento, así que todavía un disco duro tradicional te puede servir para almacenar tu biblioteca de juegos. Sin embargo, un SSD SATA es una mejora recomendable, especialmente por la futura implementación de DirectStorage en Windows.

Conclusión

Y sí, hay muchos factores a la hora de armar tu sistema. Te dejamos otra herramienta en línea. Se llama Logical Increments y te presenta diferentes configuraciones de sistemas.

Aquellos en “Modest” ya son bastante aceptables para juegos en Full HD, especialmente si tienes un monitor con baja tasa de refresco. Sistemas en “Great” te darán una buena experiencia en 1440P y aquellos en “Exceptcional” no te defraudarán en 4K.

Lo importante es que armes un sistema que se ajuste a tus necesidades.