El streamer Curtoss se afeitó la cabeza en una transmisión en vivo con motivo de caridad, pero no se esperaba encontrar esta abolladura por el uso prolongado de audífonos.
Un streamer de Twitch quedó atónito después de transmitir en vivo a sí mismo afeitándose el cabello para caridad y percatarse de una gran marca en su cabeza por usar sus audífonos todos los días.
Curtoss realizó una transmisión para recaudar fondos para la organización benéfica Leukemia & Lymphoma Society. Y mientras se afeitaba, se dio cuenta del detalle.
Una gran hendidura
“La afeitadora funciona como un campeón”, dijo Curtoss, mientras comenzaba a afeitarse el cabello por la mitad de la cabeza.
En cuestión de segundos, notó una hendidura en la parte superior de su cabeza. "Amigo, tengo un hueco aquí, ¡aquí es donde van mis auriculares!", dijo a los espectadores. “¡Tengo un hueco de auriculares en mi cabeza! ¿Qué diablos?”
“Siempre pensé que era solo mi cabello”, agregó.
Los clips del momento se han hecho virales en todas las redes sociales, recibiendo millones de visitas al día.
No era el único
Sorprendentemente, Curtoss no fue el único en encontrar una hendidura en la cabeza por usar audífonos prolongadamente.
“Bienvenido al club”, respondió un usuario de Twitter, quien compartió fotos de dos jugadores con abolladuras en sus cráneos.
“Nuevo miedo recién desbloqueado”, escribían varios jugadores.
¿El uso de prolongado de audífonos realmente pueden causar daños permanentes? Si bien existen riesgos al usar auriculares durante largos períodos de tiempo, las muescas en la cabeza son temporales. De hecho, Headphonesty informa que se necesitan al menos 135 kg para causar una fractura menor en el cráneo. Eso sí, es muy probable que llevar auriculares todo el día sí que pueda deformar esa capa de nuestro cuero cabelludo.
El problema verdadero detrás del uso es la pérdida paulatina de la audición. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que alrededor del 50 % de las personas de 12 a 35 años corren el riesgo de perder la audición debido a la exposición prolongada y excesiva a sonidos fuertes, incluso a través de auriculares.
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