El presidente de la Asociación Civil Transparencia, Álvaro Henzler, aseguró que existe "un consenso absoluto y evidencia inobjetable" de que la democracia atraviesa una grave crisis, acentuada en la última década. Precisó que mejorar este escenario requiere de canales de diálogo, reacción ciudadana, política y consensos.
El presidente de la Asociación Civil Transparencia, Álvaro Henzler, señaló que la democracia en el Perú atraviesa una “depresión” y “recesión”, escenario generado en las últimas décadas, pero que se agravó ante la afectación del estado de derecho en el país y la vulneración del principio de separación de poderes.
En Ampliación de Noticias, Henzler indicó que existe “un consenso absoluto y una evidencia inobjetable de que la democracia no solamente" no está encaminada, "sino que hay un huaico que nos ha caído, ya hace mucho años”.
En ese sentido, recordó que la última edición del Latinobarómetro (2023) reveló que los peruanos “somos los ciudadanos de la región más insatisfechos con la democracia y con los partidos [políticos]”. También lamentó que, a inicios del año pasado, el Perú dejara de ser considerado una democracia y fuera catalogada como un "régimen híbrido", por la revista inglesa The Economist.
“Esta recesión democrática sucede en el mundo hace 10 años y en el Perú también. No es producto de un presidente en particular o un congreso, es algo que venimos sufriendo desde hace mucho tiempo", señala. Asimismo, indica que "no se debería pensar, de manera ilusa, que la democracia se puede recuperar plenamente, sino en comenzar a encauzar esos huaycos en canales de conversación, de diálogo y -ojalá- de reacción ciudadana y política para tener la democracia que tanto soñamos".
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Indicador de la “depresión democrática”
Henzler sostuvo que, durante el año pasado, existieron características particulares que dieron pie a la degradación de la democracia. Una de ellas fue la pérdida del “pacto implícito del estado de derecho” y el hecho de que existiera una afectación al principio de separación de poderes”.
“Hemos perdido ese pacto de respetar el imperio de la ley y poner por encima nuestras preferencias y defenderlas a toda costa”, refirió.
Iniciativas en busca de soluciones
El presidente de Transparencia manifestó que la crisis que enfrenta el país es tan profunda que se requiere no solo empezar a acercar las posiciones de los demócratas, sino que es “urgente que los no extremistas tengan la generosidad” de concurrir en este diálogo.
Para ello, la asociación ha contemplado tres ideas: La primera consiste en la necesidad de que se elabore “un plan nacional para fortalecer la democracia”, que debe ser elaborado a partir del diálogo con los partidos políticos, los ciudadanos, empresarios y sindicatos.
“Estoy en plena ronda de entrevistas uno a uno con todos los dirigentes de los partidos políticos y los empresarios. Estamos recogiendo las voces y vamos a tener mesas de diálogo para encontrar algunos consensos mínimos y también discrepancias válidas”, precisó Henzler y recalcó que hacia fin de año se presentará una síntesis de este plan.
Como segunda propuesta, calificó como “un grave problema que el ciudadano no se sienta parte de la democracia”, por lo que, desde Transparencia, se impulsará un laboratorio de innovación democrática en el Perú y la participación ciudadana.
Finalmente, indicó que la asociación ampliará su labor de observación electoral para las próximas elecciones para dar la certeza de la realización de comicios limpios y transparentes. Este papel, indicó, no se restringe solo al día principal del proceso electoral, sino a meses antes con el objetivo de brindar información a la ciudadanía y alertar sobre sucesos no democráticos.
Es preciso señalar que, días atrás, en una carta dirigida a la ciudadanía, Transparencia denominó al 2023 como "el año el año de la consolidación de una depresión democrática". En el texto, la asociación señaló que la actuación del Congreso, el retroceso en la lucha contra la corrupción, así como el impacto de acontecimientos y decisiones de nuestras autoridades han hecho que la democracia, en el Perú, esté en peligro.
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