“Son estilos de gestión”: ministros defienden el silencio de Dina Boluarte y señalan que ha adoptado un “perfil bajo”

La presidenta Dina Boluarte lleva cerca de 90 días sin conceder entrevistas ni dar declaraciones a los medios de comunicación. A los pedidos para que la mandataria declare sobre los temas coyunturales, se ha sumado una persona que en su momento fue clave en el Ejecutivo: el ex primer ministro Alberto Otárola.

Y es que, lejos de promover el diálogo, Boluarte Zegarra instó este miércoles, en medio de una actividad oficial tras su viaje a China, a la prensa a destacar los logros del Ejecutivo y dejar de lado las “noticias tendenciosas”.

Así, el exjefe del Gabinete Ministerial – quien renunció al cargo por el caso de Yaziré Pinedo, una joven vinculada a él que ganó contratos con el Estado – invocó ayer a la jefa de Estado a poner fin al silencio mediático al que ha recurrido después de que estallara el caso ‘Rolex’.

A modo de sugerencia le dijo: “Siempre es bueno hablarle al país y también a la prensa; sería un respetuoso consejo que le daría. No vería nada de malo que le hable a la prensa y al país”.

Uno de los primeros integrantes del Ejecutivo que ha salido a responder es el ministro de Desarrollo Agrario y Riego, Ángel Manero, quien señaló que “muchas veces se malinterpretan las palabras de la presidenta” y negó que la jefa de Estado haya querido marcarle la pauta a los medios de comunicación.  

“Creo que como representantes del Ejecutivo nos corresponde poner temas en agenda siempre, yo creo que muchas veces se malinterpretan las palabras de la presidenta. Pero yo creo que siempre lo dice de buen talante y siempre la encuentro de buen humor”, comentó en el programa ‘La Rotativa del Aire-Edición Mañana’.

“Es un reto a la prensa para que difunda los logros del Ejecutivo”, agregó.

Manero defendió el silencio prolongado de la jefa de Estado al decir que ha optado por un “perfil bajo” y que es el jefe del Gabinete Ministerial, Gustavo Adrianzén, la persona que sale a dar la cara a la prensa para llenar “ese vacío”.

“Si la presidenta opta por un perfil bajo, ahí está el premier para llenar ese vacío. El premier siempre declara y no veo inconveniente en ello”, comentó.

Para el titular del Midagri, un presidente que declare constantemente podría padecer de un “desgaste”, por lo que insistió en que Gustavo Adrianzén sea quien dé las declaraciones, y que la jefa de Estado se pronuncie en ocasiones excepcionales, como un mensaje a la nación.

“La otra vez citaba a Italia, con un presidente de perfil bajo y un premier que es el que constantemente está en los medios. De modo que creo que son estilos de gestión, que tampoco es malo. Yo creo que un presidente declarando constantemente en los medios va a sufrir un desgaste”, complementó.

Ministro Raúl Pérez-Reyes también defendió el silencio de la presidenta

Por su parte, el ministro de Transportes y Comunicaciones, Raúl Pérez-Reyes, alegó que desde el Ejecutivo se tiene un “rumbo clarísimo” que se ha demostrado con el reciente viaje de la presidenta a China, para reunirse con su homólogo chino Xi Jinping.  

Asimismo, el titular del MTC suscribió las declaraciones de Ángel Manero y alegó que en la mayor parte de los países los presidentes “no declaran” diariamente a la prensa.

Para Raúl Pérez-Reyes no existen inconvenientes sobre el silencio de Boluarte Zegarra, puesto que el Ejecutivo tiene como voceros a al premier Gustavo Adrianzén y a los titulares de cada cartera ministerial, para dar cuenta de sus gestiones o de temas de coyuntura.

“[¿Cree que la presidenta no debería dar declaraciones y que ese lugar debería ser ocupado por el primer ministro?] En la mayor parte de los países los presidentes no declaran todos los días a la prensa”, respondió.

“Lo importante es que el Gobierno, a través de sus distintos voceros (ministros y el premier), estemos dando opiniones sobre distintos temas que tienen que ver sobre la política pública [sic]”, finiquitó.

La última vez que Dina Boluarte le contestó a los medios de comunicación se remonta a abril de este año, cuando respondió desde Palacio de Gobierno a los cuestionamientos por sus joyas y relojes lujosos de la marca Rolex; los cuales ocasionaron que la Fiscalía inicie una investigación en su contra por los presuntos delitos de enriquecimiento ilícito, omisión de consignar declaraciones y cohecho pasivo impropio.