El crimen de la pequeña ocurrió en el 2017 y tardó casi seis años para tener una sentencia en primera instancia. Richard Sandoval Leandro fue condenado por parricidio, mientras que la madre de la menor también fue juzgada por omisión impropia. Ambos afrontaban el proceso en libertad.
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La Corte Superior de Justicia de San Martín sentenció en primera instancia a Richard Jesús Sandoval Leandro a cadena perpetua por el delito de parricidio. El sujeto fue juzgado por violar y asesinar a su propia hija de apenas 11 años.
Asimismo, se condenó a Irene Comitivo Villacorta, madre de la niña, por omisión impropia por el delito contra la vida el cuerpo y salud en la modalidad de Parricidio en agravio de su hija y por ello se le impuso la pena de veintiocho años.
Este crimen se dio en la ciudad de Yurimaguas el pasado 28 de febrero del 2017. La niña de 11 años fue abusada sexualmente en el dormitorio de sus padres y según información de la Policía Nacional, la pequeña fue encontrada desangrada, pues habría sido asesinada con un arma punzocortante.
Ambos condenados también deben pagar diez mil soles por concepto de reparación civil. El dinero irá en favor del Centro de Emergencia Mujer Sede Alto Amazonas.
Los padres de la víctima estuvieron con prisión preventiva en la cárcel de Yurimaguas, pero solo hasta finales del 2017. La Sala de Apelaciones de la Sala Penal de Tarapoto les otorgó libertad para que afronten el proceso por comparecencia.
Es por ello que la Corte de San Martín dispuso que se suspenda la ejecución provisional de la condena hasta que la sentencia sea confirmada en segunda instancia.
El caso de la menor trajó una fuerte indignación en la población de Yurimaguas desde lo ocurrido. Las principales quejas iban dirigidas a la Fiscalía por la demora en las investigaciones, pues ya son casi seis años desde que ocurrió el crimen.
Condenan a violador en Chimbote
El Juzgado Penal Colegiado Supraprovincial de la Corte Superior de Justicia del Santa, en Chimbote, condenó a cadena perpetua a José Miguel Cano Moreno (54), tras ser hallado culpable del abuso sexual de una menor de 13 años. El tipo fue juzgado por violación sexual.
La Fiscalía informó que el sujeto había abusado hasta en dos oportunidades de la niña. La primera ocasión fue la tarde del 19 de marzo del año pasado, cuando la agraviada llegó a inmediaciones de la casa del depravado, en el asentamiento humano Los Jardines, en el pueblo joven San Pedro. La adolescente buscaba a su hermano menor, quien jugaba por la zona.
José Miguel Cano logró que la víctima ingresara a la vivienda con engaños, tras lo cual abusó de ella. La hermana mayor de la adolescente fue quien denunció el ataque ante la Policía Nacional.
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