Según las primeras investigaciones, el alcalde y los funcionarios están presuntamente comprometidos en el mal manejo del dinero destinado a obras que ejecuta la municipalidad provincial de Chucuito-Juli, en Puno.
Efectivos Policiales de la Dirección Contra la Corrupción de funcionarios de Puno detuvieron al alcalde y cuatro funcionarios en las instalaciones de la municipalidad provincial de Chucuito-Juli por el presunto delito de colusión agravada, así lo informó la Policía Nacional del Perú (PNP).
Justo Apaza Delgado (59) alcalde de la municipalidad provincial de Chucuito-Juli, fue detenido junto a los funcionarios identificados como Alejandro Serafín Llaza Juanito (42) gerente de infraestructura, Mauro Cerpa Juarez (50) sub gerente de supervisión y liquidación de obras, Richard Payehuanca Justo (37) supervisor de obras, Brandon Edwin Ramos Flores (28) residente de obras y Harol Laico Quispe (28) representante comunal del Consorcio Kelluyo.
Según las primeras investigaciones, el alcalde y los funcionarios están presuntamente comprometidos en el mal manejo del dinero destinado a obras que ejecuta la municipalidad provincial de aquella localidad.
Los funcionarios y el alcalde fueron trasladados hasta las instalaciones de la Dirección Contra la Corrupción de Funcionarios de la policía nacional, donde se continúan con las investigaciones.
Crimen en Puno
Hace días, una pareja de esposos y sus dos hijos menores de edad fueron hallados sin vida al interior de su vivienda ubicada en la urbanización Bellas Artes, del distrito de Caracoto, en la ciudad de Juliaca (Puno). El macabro hallazgo se produjo el último sábado, 17 de diciembre.
Según la PNP, los restos de los cuatro miembros de la familia, encontrados en estado de descomposición, han permanecido en la casa desde hace tres semanas, razón por la cual emanaba un mal olor desde la vivienda.
La Policía maneja una hipótesis macabra: el padre de familia, que fue identificado como Alfredo Humana Ayala (38), habría asesinado a su esposa, Cleotilde Barrios Pérez (30), en la cocina y, luego, se habría encerrado en otro cuarto para terminar con la vida de sus dos hijos de cinco y nueve años. Al asesinar a los integrantes de su propia familia, Humana Ayala se suicidó.
De acuerdo el testimonio de los vecinos, el sujeto trabajaba en la Mina Rinconada y solo llegaba a Juliaca para ver a su familia durante los fines de semana.
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