Las actividades comerciales también están paralizadas y el tránsito peatonal es nulo en la ciudad, en el marco de las protestas contra la presidenta Dina Boluarte.
Desoladas y silenciosas. Así lucen las calles de Puno tras las 17 muertes y los más de 50 heridos que se registraron durante las violentas protestas del último lunes, 9 de enero, contra el Gobierno de Dina Boluarte. Apenas un par de personas transitan por las calles de la ciudad, mientras que las instituciones públicas y privadas permanecen resguardadas por la Policía Nacional del Perú (PNP).
Las actividades comerciales están completamente paralizadas en la ciudad puneña de Juliaca ante los saqueos a dos reconocidos centros comerciales, así como los ataques a las sedes del Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (Reniec), Jurado Nacional de Elección, Ministerio Público, entre otros.
Al promediar las 07:00 a.m., un contingente policial llegó al jirón Ilo para resguardar el conocido supermercado Plaza Vea. En los exteriores del centro comercial aún se pueden apreciar fierros retorcidos de bicicletas, basura y los restos de vidrios rotos: un completo caos.
Un panorama similar se vivió en la ciudad puneña de Ilave, donde, además de los ataques a otras sedes públicas como el Poder Judicial y la Fiscalía, un grupo de manifestantes incendió la vivienda del congresista puneño Jorge Luis Flores Ancachi, quien ha señalado que no se quedará con los brazos cruzados tras el ataque a la propiedad de sus padres.
Según información del corresponsal de RPP Noticias en Puno, el tránsito de peatones es nulo; tal es así que las personas circulan cada 20 o 30 minutos.
Si bien las calles puneñas lucen silenciosas, el panorama es distintos en las afueras del Hospital Carlos Monge Medrano de Juliaca, a donde llega la población para preguntar por los nombres de los fallecidos y heridos durante la jornada de protesta que se retomó desde el pasado miércoles, 4 de enero, y que se ha cobrado la vida de 17 personas.
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Tres días de duelo tras las 17 muertes durante protestas en Puno
El Gobierno Regional de Puno decretó tres días de duelo en todo el departamento por las 17 muertes registradas durante las violentas protestas del último lunes 9 de enero en Juliaca.
El decreto firmado por el gobernador Richard Hancco Soncco dispone que se guarde duelo regional los días 10,11 y 12 de enero, "en razon a los trágicos sucesos ocurridos en las provincias de San Roman, el dia 09 de enero del año en curso, aunándonos al dolor de las familias dolientes y solidarizándonos con la poblacion afectada".
En el documento también se invoca "al Ministerio Público el inicio de las investigaciones contra los responsables de estos deplorables hechos que enlutan a la región Puno".
Asimismo, la gobernación regional rechazó "cualquier acto de violencia y el uso exagerado de la fuerza pública por parte de la Policia Nacional del Perú y las Fuerzas Armadas del Perú, en la ciudad de Juliaca.
El decreto dispone que en todas las entidades públicas de la región el izamiento a media asta de la bandera nacional "en señal de duelo y solidaridad, durante el periodo de duelo regional".
El Minsa confirmó, a través de la Diresa Puno, la muerte de 17 personas y 52 heridos producto de los enfrentamientos en Juliaca. Esto se da en medio de las protestas contra el gobierno de Dina Boluarte.
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