Empresas aumentan en un 30% la inversión en seguridad debido al creciente número de extorsiones en Piura

Según declaraciones del presidente de la Cámara de Comercio y Producción de Piura, Javier Bereche, la preocupación por la inseguridad ciudadana ha alcanzado niveles alarmantes. El temor se agravó desde el último operativo llevado a cabo por el INPE en el penal de varones de Piura, donde se descubrieron manuscritos con aproximadamente 600 víctimas de extorsión, destacando empresarios de la región Piura. 

Bereche hizo un enérgico llamado a las autoridades, a la Policía Nacional del Perú (PNP), al Ministerio del Interior, y a la Presidencia del Consejo de Ministros, urgiendo a establecer una estructura y estrategia sólidas para combatir el crimen organizado.

"Ya no estamos hablando de delincuencia urbana o delincuencia común", señaló Bereche. "Estamos hablando de que en nuestro país el mayor flagelo que tiene en este momento es la inseguridad que proviene del crimen organizado".

Como medida de precaución, las empresas en Piura han tenido que aumentar su inversión en seguridad en un 30%. Esto implica gastos en sistemas de alarmas remotas, seguridad presencial y seguridad armada. Esta última representa un costo dos o tres veces mayor que la seguridad sin armamento. Además, se han implementado medidas como cercos y blindajes en las instalaciones para prevenir actos criminales.

Sin embargo, Bereche destacó la dificultad que enfrentan las empresas con bajos niveles de rentabilidad para realizar tales inversiones. "Lamentablemente un negocio o una empresa que tiene una rentabilidad baja no tiene la espalda financiera para poder invertir en estos elementos", explicó.

También señaló que la inseguridad, junto con la incertidumbre política y fenómenos naturales como el Fenómeno del Niño, ha afectado gravemente las expectativas de inversión privada en la región. "Hasta el año 2020, recibíamos inversiones privadas de dos dígitos por año", comentó Bereche. "Sin embargo, desde entonces, las inversiones han sido negativas, y este año se sitúan en cero".

Aumentan los casos de extorsión y robo a bodegueros peruanos

Un creciente número de bodegueros en el país se han convertido en blancos de extorsiones y robos, según reveló recientemente Andrés Choy, presidente de la Asociación de Bodegueros del Perú (ABP). Cerca de 13 mil de estos comerciantes fueron víctimas de estos delitos hacia el cierre del año 2023, lo que marca un alarmante aumento desde el año 2021.

Consultado acerca de las zonas del país donde se ha observado un incremento significativo en estos índices delictivos, Choy señaló que Lima y Callao encabezan la lista, seguidas por Trujillo en el segundo lugar. Arequipa, por su parte, se posiciona en el tercer puesto.

Esta última ubicación de Arequipa es particularmente notable, ya que anteriormente eran Piura o Chiclayo quienes ocupaban esta posición.