La comunidad campesina, que hasta el pasado miércoles mantenía bloqueado el reservorio de Viña Blanca, denunció abusos por parte de los trabajadores de la empresa minera.
La comunidad campesina de Tumilaca Pocata Coscore y Tala, que hasta el pasado miércoles mantenían bloqueadas la línea férrea de Southern Perú, a la altura del túnel R2, y el suministro de agua del reservorio de Viña Blanca, denunció abusos de parte de la empresa y de los trabajadores mineros, luego de firmada el acta de levantamiento temporal de su medida de fuerza.
En un comunicado difundido hoy, la comunidad señala que, al día siguiente de aceptado el diálogo con Southern Perú, los trabajadores mineros “incendiaron” sus pertenencias.
“Los trabajadores de la empresa incendiaron las pertenencias de los comuneros, asímismo, por el lado norte de Viña Blanca, ingresó maquinaria pesada de la empresa [y] minutos después confirmamos que se había destruido y enterrado nuestras cabañas conjuntamente con nuestras pertenencias”, revela el citado comunicado.
Asimismo, según la comunidad, los trabajadores de la empresa quemaron su bandera, “símbolo importante de nuestra comunidad”, como un acto de provocación.
La comunidad campesina sostiene que estos actos fueron cometidos “al promediar las 8:30 a. m.”; es decir, antes de que llegara “la comitiva oficial” integrada por representantes de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM), y de los gobiernos regional y local que debían constatar que los comuneros habían levantado la medida de fuerza.
Al respecto, los comuneros cuestionaron que el ingreso de los trabajadores mineros a las instalaciones de Southern se haya realizado antes del ingreso de “la comitiva oficial”, y que los actos se hubieran cometido desacatando el “estado de emergencia” decretado por el Ejecutivo en el distrito de Torata, y los acuerdos previos “al inicio de la instalación de la mesa de diálogo”.
Denuncias de los trabajadores
Por otro lado, según informó RPP, los trabajadores mineros denunciaron que la comunidad había causado destrozos en el reservorio de Viña Blanca que abastece de agua al campamento minero de Cuajone.
Al respecto, denunciaron que la válvula que permite el paso del agua se encontraba dañada y que había un forado en un muro de contención por donde se estaba filtrando el agua.
Como se sabe, tras la suscripción de un acta entre la comunidad campesina, los trabajadores y representantes del Ejecutivo, los comuneros decidieron levantar su medida de fuerza por un plazo de 15 días, durante la instalación de una mesa de diálogo multisectorial.
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