El Perú ha tenido 12 constituciones en lo que va su vida republicana, desde que don José de San Martín decretó su independencia en el año 1821. Sin embargo, ¿Sabía que también tuvimos una Carta Magna "Española" y que existieron otros estatutos que se implementaron para dirigir nuestra patria pero que finalmente no se aplicaron?
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La Constitución es la norma básica que rige el ordenamiento jurídico de un Estado. En el Perú nuestra Carta Magna es la ley fundamental que rige el derecho, la justicia y las normas, además de ser la base sobre la que se organiza el país. La Constitución garantiza la existencia de un Estado en el cual los derechos fundamentales de los ciudadanos están debidamente garantizados para asegurar la subsistencia de la sociedad.
El Perú cuenta con 12 constituciones en su vida republicana luego que don José de San Martín decretara nuestra independencia en el año 1821. Se debe considerar otras constituciones que fueron aplicadas nominal o efectivamente en el Perú, como el caso de la Constitución Española de 1812 llamada popularmente “La Pepa”.
También están las constituciones de breve lapso para los Estados Nor Peruano y Sur Peruano de 1836 y 1839 respectivamente, así como una ley fundamental para la Confederación Peruano-Boliviana, que no llegó a ser aplicada. La primera Constitución del Perú fue la de 1823, la cual fue aprobada por un congreso constituyente. Aunque tuvo un carácter provisional, establecía al Parlamento como autentico representante de la voluntad popular, incluso por encima del Ejecutivo.
La segunda Carta Magna, promulgada en 1826, es conocida como "La Vitalicia". Fue diseñada a medida para Simón Bolívar y se considera una réplica de las constituciones francesas y napoleónicas. Esto se debe principalmente a que adoptó el modelo de tres cámaras que se popularizó en Francia. Así lo recordó el abogado constitucionalista y profesor universitario Domingo García Belaunde.
"Las únicas constituciones que fueron unicamerales fueron las del 56 y 67 durante muy poco en el siglo 19 y la otra es de Bolívar que tenía tres cámaras que era una cosa de locos", precisó Domingo García Belaunde.
La denominada "Madre de todas las Constituciones" fue promulgada en el año 1828. Su importancia radica en que fue emitida cuando el Perú quedó sin alguna fuerza auxiliar extranjera. Proponía una revisión periódica cada cinco años, lo cual terminó conduciendo a su reemplazo. La Constitución de 1839, emitida durante el régimen de Agustín Gamarra, se caracterizó por ser conservadora y autoritaria, ya que otorgaba un mayor poder al ejecutivo y limitaba los derechos individuales.
La Constitución de 1856, promulgada durante el Gobierno de Ramón Castilla, fue notablemente más liberal. Es recordada por su reconocimiento de la inviolabilidad de la vida humana, lo cual condujo a la abolición de la pena de muerte. Este hecho fue destacado por el abogado penalista Luis Lamas Puccio.
"Está científicamente demostrado que la pena de muerte no disuade, se convirtió en una medida eminentemente resarcitiva, aflictiva en términos de emitir un mensaje a la opinión pública de que un sujeto es ejecutado legalmente por cometer un hecho execrable, un delito grave", dijo Luis Lamas Puccio, abogado penalista.
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La Constitución de 1860 es la más duradera ya que estuvo vigente hasta la década del siglo XX. Fue caracterizada por ser más moderada en comparación con sus predecesoras. Esta Constitución estableció la facultad presidencial de disolver el Congreso. La Constitución de 1920 es conocida como "La Constitución de la Nueva Patria", por las intenciones de Augusto B. Leguía de dejar atrás un siglo tumultuoso y conflictivo.
La crisis económica de Wall Street llegó al Perú y provocó la renuncia del presidente del "Oncenio" y la convocatoria a un nuevo Congreso que promulgaría la Constitución de 1933 durante el gobierno de Luis Sánchez Cerro. Esta constitución fue la más duradera del siglo XX y recordada por haber hecho posible el sufragio en las elecciones municipales de las mujeres mayores de 21 años.
La Constitución de 1979 reflejó el retorno a la democracia, evidenciado a través de un documento en el cual la Asamblea Constituyente creó el Tribunal de Garantías Constitucionales. Esta carta magna incorporó los derechos fundamentales y otorgó rango constitucional a los tratados sobre derechos humanos. Además, añadió el derecho a la insurgencia, la ciudadanía a partir de los 18 años y el derecho al voto para las personas analfabetas, que marcó un hito en el país, según destacó Karen Poulsen, investigadora de la Pontificia Universidad Católica del Perú.
"Este gran marco se cierra en el año 79 cuando en otra Asamblea Constituyente, que da la Constitución de 80 se otorga el derecho al sufragio a los analfabetos y como sabemos , es una triste realidad , pero la mayor parte de los analfabetos siguen siendo mujeres , entonces esto fue un largo proceso que abarca prácticamente el siglo 20 en el cual se dan estas luchas", expresó Karen Poulsen.
En la actualidad, está en vigor la Constitución de 1993, la cual fue promulgada tras la disolución del Parlamento Nacional durante el régimen de Alberto Fujimori. Por entonces, la propuesta de una nueva Constitución fue presentada por el Congreso Constituyente Democrático y sometida al voto popular, siendo aprobada. Sin embargo, esta Carta Magna ha sido objeto de controversia debido a su contenido, lo que ha llevado a que constantemente un sector de la población busque su reemplazo.
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