La deportista ancashina Flor Cuenca conquistó la cima de la montaña Kanchenjunga, de más de 8 500 metros sobre el nivel del mar. Dedicó este logro al montañista peruano Richard Hidalgo, quien falleció en el 2019.
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La reconocida montañista de la región Áncash, Flor Cuenca, alcanzó la cima de la tercera montaña más alta del mundo en el Himalaya sin el uso de oxígeno artificial, según informó la misma andinista a través de sus redes sociales.
Después de 25 días de ascenso, la deportista ancashina llegó a Kanchenjunga, a más de 8 500 metros sobre el nivel del mar, montaña ubicada en la cordillera del Himalaya, entre India y Nepal.
Flor dedicó este logro al montañista peruano Richard Hidalgo, quien falleció en el 2019 en los montes del Himalaya mientras intentaba ascender la cumbre del Makalu.
Con esto, Flor Cuenca, natural de la provincia de Carlos Fermín Fitzcarrald, suma su séptima cumbre de los 14 que existen en el planeta, sin ayuda de oxígeno artificial.
El año pasado la escaladora ancashina ya había coronado la cumbre de la montaña K2, la segunda más alta de la tierra y considerada la “Montaña Salvaje de los Himalayas”.
El legado de Richard Hidalgo
Richard Hidalgo era un hombre de montaña. Su muerte reportada el 8 de mayo del 2019 tomó a todos por sorpresa: el montañista peruano fue encontrado en su tienda a 6.600 metros, cuando intentaba alcanzar la cima del Makalu, la quinta montaña más alta del mundo.
Richard tenía un reto que se había impuesto a sí mismo. Quiso conquistar las catorce montañas de más de 8.000 metros sin oxígeno adicional antes del 2021, año en el que Perú celebrará el bicentenario de su independencia. Makalu, el lugar de su último respiro, iba a ser la sexta montaña que nuestro compatriota tenía previsto conquistar.
Hidalgo ya había pisado la cima del Shishapangma (8.027 metros), el Cho Oyu (8.201 metros), el Manaslu (8.163 metros), el Annapurna, (8.091 metros) y el Gasherbrum II (8.035). El Everest era su asignatura pendiente y había intentado escalarlo sin éxito en varias ocasiones. Una de ellas fue en abril del 2015 cuando ocurrió el terremoto de magnitud 7.9 que golpeó Nepal.
El fuerte sismo provocó un alud que mató a una veintena de personas que escalaban el Everest y dejó unas 8.900 personas muertas en Nepal.
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