El director del hospital, Gustavo Lanatta Luján de Bagua, informó que la causa del fallecimiento de la mujer fue una hemorragia causada por una rotura uterina, sugiriendo una presunta negligencia médica y falta de atención.
El Hospital Gustavo Lanatta Luján de Bagua, en la región Amazonas, ha iniciado un proceso administrativo contra todo el personal de salud que estuvo de turno cuando falleció Yamilí Montenegro Herrera, una joven madre de 27 años y su bebé de 29 semanas de gestación.
La decisión la tomó el director del hospital, Yesper Saravia Díaz, quien informó que la causa del fallecimiento de la mujer fue una hemorragia, causada por una rotura uterina, sugiriendo una presunta negligencia médica y falta de atención.
“Una rotura uterina sí se puede solucionar con una atención médica oportuna. Por eso es que definitivamente, todo se encuadra en que trata de una negligencia médica. A pesar de que tendría que haber una evaluación por un proceso no especializado. Si encuadra en el tema de que sí se pudo resolver esa emergencia en el hospital. […] Es el tema del profesional que no ha resuelto esa emergencia”, dijo Yesper Saravia Díaz a RPP.
Según Saravia, la emergencia podría haberse resuelto con atención médica oportuna, pero resaltó la carencia de un servicio de neonatología. Actualmente, cuatro personas están siendo investigadas en relación con este caso, aunque no se descarta que se sumen más durante la investigación en curso. El director del hospital afirmó colaborar activamente con la Fiscalía para esclarecer los hechos.
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La familia de Yamilí Montenegro marchó por las calles de Bagua para exigir que el fiscal a cargo del caso solicite la prisión preventiva para los tres médicos de turno, alegando que no brindaron la atención oportuna a la gestante, sin embargo, la Policía Nacional informó que los investigados, quienes permanecían detenidos preliminarmente, fueron puestos en libertad por disposición fiscal.
Como se recuerda, la tragedia ocurrió cuando Yamilí ingresó al hospital con fuertes dolores estomacales, y a pesar de la persistencia de los síntomas, la atención médica inicial no se consideró adecuada. La situación empeoró a lo largo de la noche, culminando en la trágica muerte de la madre gestante y su bebé de 29 semanas.
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