Si alguna enseñanza debe dejarnos la nefasta gestión de Pedro Castillo es que las corrientes democráticas tienen que forjar consensos para restablecer la confianza de la población.
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Como era previsible, la caída de Pedro Castillo ha producido movilizaciones y protestas entre sus partidarios. Al parecer, algunos de ellos están dispuestos a pasar por alto la tentativa de golpe de Estado, así como las graves imputaciones de corrupción que hay contra él y contra personas de su entorno familiar y político. ¿Por qué el ex ministro Juan Silva habría optado por vivir bajo la protección del asilo concedido por la dictadura de Venezuela? ¿Por qué intentó Castillo huir a México? ¿Por qué nombró a tantos funcionarios incompetentes, muchos de los cuales son hoy colaboradores de la Justicia, gracias a los cuales comenzamos a conocer los niveles de abyección a los que se había llegado en la cúspide del Estado? Basta con contrastar su discurso del martes por la noche con el anuncio de la mañana del miércoles para concluir que Castillo no tenía ningún reparo en mentir y en disfrazar sus intereses mezquinos tras la grandilocuencia de ideales en los que no creía. Durante los últimos meses se dedicó a construir una red de apoyo y promovió para eso la creación de organizaciones populares, que le fueran útiles en su intento de asegurarse poder e impunidad. No sorprende por eso que se produzcan protestas y movilizaciones. Lo sucedido en torno al aeropuerto de Andahuaylas es grave y ha dejado un doloroso saldo de pérdida de vidas humanas. Tanto el Consejo de ministros como el Congreso sesionaron anoche. El primero preparó un proyecto para adelantar las elecciones generales a abril del 2024. El Congreso tubo que interrumpir su sesión a causa de un acto de violencia que esperemos que no se convierta en símbolo: el castillista Pasión Dávila propinó un golpe por la espalda a un colega que no pensaba como él. Si alguna enseñanza debe dejarnos la nefasta gestión de Pedro Castillo es que las corrientes democráticas tienen que forjar consensos para restablecer la confianza de la población.
Las cosas como son
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