Solo 1 de cada 10 trabajadores peruanos cuenta con empleo decente, según las últimas cifras del Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE).
Pese a que el empleo se ha venido recuperando el último año tras la crisis económica producida por la pandemia y ya son más de 17 millones de peruanos los que actualmente cuentan con un trabajo, este crecimiento no se traduce necesariamente en empleos de calidad.
Al cierre del 2021, la tasa de informalidad en nuestro país alcanzó su mayor nivel de los últimos 11 años con un 76.8%, según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI). Esto quiere decir que aproximadamente 3 de cada 4 peruanos tienen un empleo sin beneficios sociales y/o trabajan en lugares no registrados.
La Sociedad de Comercio Exterior del Perú (Comex Perú) sostiene que la informalidad no solo es perjudicial para las empresas y los trabajadores sino que también ralentiza el desarrollo económico del país. Y esto se da, entre otros motivos, porque las empresas pertenecientes al sector informal suelen producir a baja escala para evitar ser detectadas.
Juan Lira Loayza, director general de Derechos Fundamentales y Seguridad Social y Salud en el Trabajo del Ministerio del Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE), compartió con RPP cuáles son las garantías laborales que corresponden a un empleo de calidad y cómo podemos incentivar la creación de más de estos puestos de trabajo en nuestro país.
Solo 1 de 10 trabajadores cuentan con trabajo decente
Hasta enero de 2022, un total de 3 millones 771 mil trabajadores laboraban en empresas formales del sector privado; sin embargo, más de la mitad no estuvo registrado en la Planilla Electrónica del MTPE, lo cual indica que incluso dentro de la formalidad existe una alta incertidumbre laboral.
Lira explica que para que un trabajo sea considerado de calidad no basta con que se encuentre dentro del sector formal. El trabajo decente, señala, es aquel que garantiza el cumplimiento de los derechos laborales fundamentales, el acceso a un salario justo y proporcional, a trabajar sin ningún tipo de discriminación, el disfrute de jornadas laborales reguladas y descanso periódico, seguridad ocupacional, acceso a la protección social y al diálogo.
Con esta definición, de acuerdo con la Política Nacional de Empleo Decente presentada por el MTPE en junio del 2021, solamente 1 de cada 10 trabajadores peruanos contaban con un empleo decente hasta la fecha. Este documento señala además que, de todos los sectores económicos, ninguno llega a tener, aunque sea, a la mitad de sus trabajadores con empleo decente.
Ante ello, el funcionario del MTPE resalta el trabajo del Consejo Nacional de Trabajo y Promoción del Empleo y el Consejo Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo, los cuales reúnen a trabajadores, empleadores y el Estado para la concertación de políticas de trabajo, promoción del empleo y capacitación laboral, y de protección social para el desarrollo nacional y regional.
Promoción y capacitación en innovación y gestión
Para que nuestro país prospere económicamente no basta con generar más puestos de trabajo, sino también asegurar que sean empleos de calidad. Aunque desde el MTPE destacan los esfuerzos del Estado mediante la red de Centros de Innovación y Transferencia Tecnológica (CITE), donde se ofrecen capacitaciones sobre nuevas tecnologías, uso de equipos y gestión empresarial a las micro y pequeñas empresas (mypes), precisan que todavía no hay evidencia de su impacto.
Asimismo, otra iniciativa que resalta el MTPE es el Kit Digital, una plataforma del Ministerio de Producción que facilita a las mypes el acceso a servicios digitales y/o cursos virtuales empresariales en colaboración con instituciones privadas y públicas para mejorar sus capacidades productivas y ventas, pero nuevamente indican que no se ha logrado evaluar su eficiencia.
Lira señala que para conseguir más puestos de trabajo decente, es necesario fortalecer primero la productividad de los empleos actuales mediante programas que fomenten la innovación y capacitación en nuevas tecnologías y gestión empresarial, ya que no solo permitirán el crecimiento de las empresas y trabajadores, sino también el desarrollo social y económico del país.
Finalmente, desde Comex Perú, explican que las actividades informales utilizan y congestionan la infraestructura pública sin contribuir con los ingresos tributarios necesarios para abastecerla. El MTPE agrega que la evasión del pago del impuesto a la renta genera una importante pérdida de productividad en la economía, pues las empresas se apropiarían del valor agregado para el Estado y los trabajadores.
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