El papa Francisco realizó multitudinaria misa en Marsella dedicada a los migrantes

El papa Francisco celebró este sábado una misa "extraordinaria" y multitudinaria en el Estadio Velódromo de Marsella, en el sur de Francia, en medio de la polémica sobre la situación de la migración a través del Mediterráneo, afirmó el periodista peruano Fernando Carvallo, de RPP Noticias.

"Hemos pasado en 48 horas en el mismo estadio, de un partido de rugby a una misa extraordinaria y muy discutida. El papa desde que llegó dijo que quería participar en esta misa en la clausura de un coloquio internacional sobre el Mediterráneo y el tema principal es la migración. Porque el Mediterráneo tiene costas europeas y de África y del Medio Oriente, y hay muchas migraciones de esos países y hemos visto barcos que naufragan, personas que mueren y ya no los quieren recibir", dijo en el programa Enfoque de los Sábados.

Fernando Carvallo, quien se encuentra en Marsella, recordó que la primera acción de Francisco como papa fue acudir a la isla italiana de Lampedussa, donde se encontraban varados migrantes africanos. Diez años después de este hecho, afirmó, se repite un hacinamiento de migrantes.

"Para él, y es una palabra fuerte que dijo, los europeos no pueden permitir que el Mediterráneo se vuelva una tumba de la dignidad. Recordó pasajes del Evangelio en donde se trata de acoger al extranjero como Jesús tuvo que eventualmente que hacer en Egipto", expresó.

"Acoger al que huye de su país"

Tras destacar al "hombre ágil de mente", Fernando Carvallo afirmó que el papa Francisco recorrió la ciudad en su papamóvil y que realizó la ceremonia religiosa de pie, a pesar de un problema en la rodilla que le impide caminar.

"Otro tema de conflicto es la presencia del presidente Emmanuele Macron, porque Francia es un país cuya Constitución define que es una República Laica; y se ha criticado que el presidente participe en un acto religioso. Macron, que se dice agnóstico, dijo que está presente porque la misa es celebrada por un jefe de Estado y porque, además, cree en los valores espirituales y entre otros que vienen de la Iglesia que deben ser promovidos en la ciudad", afirmó.

Para Fernando Carvallo, la misa en Marsella puso de manifiesto una "diversidad de orígenes étnicos y de sensibilidades y de religiones" donde el papa Francisco quiso destacar que se puede vivir en paz aceptando las diferencias sobre una base de ciertos valores del Evangelio como "acoger al que huye de su país y no quiere verse ahogado en las aguas del Mediterráneo".

"En esta misa se ha dado la palabra a mujeres delante del papa y a representantes de las principales comunidades de esta ciudad, la más poblada del sur de Francia, tiene 20 % de musulmanes, tiene 10 % de judíos, tiene 80 mil armenios, tiene turcos. Todas las etnias del mundo están presentes acá, por eso es que él ha querido dar esta homilía y participar en este evento sobre el Mediterráneo y los desafíos que plantea a los políticos", manifestó.

El viaje del papa Francisco coincide con un momento en el que Italia ha recibido más de 120 000 migrantes en los que va de año y la semana pasada se intensificaron las llegadas y en pocos días en el centro de la pequeña isla de Lampedusa se hacinaron cerca de 10 000 personas a pesar de que sólo tiene capacidad para 300.