Deportación de migrantes propuesta por Donald Trump sería una operación "demasiado costosa", dice Óscar Schiappa-Pietra

Donald Trump ha reiterado su intención de deportar masivamente a migrantes ilegales en Estados Unidos durante sus primeros días de mandato e implementar una legislación que elimina la ciudadanía por nacimiento, pese a que esta última afronta barreras legales y constitucionales.

Al respecto, el abogado Óscar Schiappa-Pietra sostuvo que una medida de tal magnitud tendrá un fuerte impacto en los más de 500 mil peruanos sin documentación legal que permanecen en el país y que, en varios casos, han constituido familias, pagado impuestos y adquirido propiedades en EE. UU., con la consigna de regularizar su situación.

En diálogo con RPP, Schiappa-Pietra consideró que será muy difícil que Trump consiga una reforma constitucional que suprima este beneficio; sin embargo, el hecho de que se discuta "ya es gravísimo".

"Es algo que va a contribuir a generar un clima xenófobo contra los inmigrantes, más del que ya existe en este momento. Va a dividir familias (...) permitiendo la deportación de padres cuyos hijos son ciudadanos estadounidenses, rompiendo la unidad familiar, que es un principio básico de derechos humanos y de política migratoria en cualquier parte del mundo", mencionó.

"Va a ser una operación demasiado costosa y ese es uno de los elementos que en algún momento puede llevar a frenar su despliegue", añadió.

Con la designación de Tom Homan como "zar de la frontera", un funcionario de discurso radical sobre la inmigración e impulsor de la separación de familias migrantes, Schiappa-Pietra no descartó la posibilidad de que aquellos que no sean inmediatamente deportados sean internados en los denominados campos de detención administrativa, lo que calificó como "una suerte de campos de concentración".

"De lo que se trata es de culpar al extranjero por todos los males que adolece EE. UU., exagerando los casos de criminalidad que son estadísticamente menores que respecto a la población blanca o a la población de color. Todo esto va generando un escenario en el cual incluso los compatriotas que puedan permanecer ahí van a estar sujetos a una presión social y eventualmente legal", aseveró.

Fortalecer los consulados en EE. UU.

Schiappa-Pietra precisó que alrededor del 30 % de trabajadores agrícolas en EE. UU. son migrantes ilegales, lo que podría tener un "efecto devastador" en este sector y en la propia actividad económica estadounidense.

Frente a todas estas posibilidades, destacó la necesidad de fortalecer los consulados peruanos en EE. UU. y trabajar en conjunto con países como Colombia, Bolivia y México para dialogar con EE. UU. respecto a la situación de sus connacionales.

En el caso de los peruanos en situación migratoria ilegal en EE. UU., no descartó que puedan ser deportados a países donde no se les pueda brindar protección, por lo que es necesario que, desde el Gobierno, se diseñen programas para acoger a estos compatriotas.

"Muchos de ellos van a llegar a Lima, no van a tener siquiera un techo donde pasar la noche, no van a tener un plato de comida, van a estar en una situación de absoluto desamparo. En algunos casos, desvinculados de su familia que se va a quedar en EE. UU.", refirió.

"Este debiera ser uno de esos temas que genera un amplio consenso ciudadano, que no se convierta, como lamentablemente ocurre con muchos otros temas, en un asunto de confrontación partidista, donde al final no se resuelven las cosas. Necesitamos un consenso, un Gobierno que actúe con prontitud, celeridad, eficacia", agregó.