La ciencia del bostezo contagioso: por qué no podemos evitarlo

Persona bostezando | Fuente: Pixabay.

Lo que la ciencia nos dice sobre los bostezos contagiosos confirma que, muy seguramente, son inevitables.

Una de las acciones más estudiadas y que aún continúa siendo un misterio son los bostezos. Hasta ahora, el mecanismo concreto que los desencadena y el propósito fisiológico no están del todo claros, pero la ciencia continúa avanzando para hallar la respuesta. Y gracias a un estudio narrado por la BBC, podemos estar seguros de algo: son inevitables. 

Lo que la ciencia sabe de los bostezos 

Según los descubrimientos de investigadores de la Universidad de Notthingham, en Reino Unido, los bostezos son acciones involuntarias que, una vez se desencadena su inicio, no pueden interrumpirse.

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La razón parece deberse al área del cerebro que estimula esta acción: la corteza primaria, que es la encargada de los comportamientos primitivos e instintivos. Mientras esta área está más estimulada, aparentemente, y según los estudios, más propensa está la persona a bostezar. 

Antes, se mantenía la hipótesis de que los bostezos eran una forma de respuesta empática frente al estado de ánimo de las demás personas. Especialmente si se trataba de los seres queridos.

Con la información que proporcionaron los investigadores de Nottingham, sin embargo, esto ahora está puesto en duda; en realidad, los bostezos podrían ser algo más involuntario y fisiológico que una simple reacción ante algo.


Niña bostezando | Fuente: Pixabay.

En el estudio, intentaron que 36 personas voluntarias contuvieran los bostezos luego de observar a otras personas hacerlo. El resultado dejó en claro que la capacidad para evitar bostezar es muy limitada, y que al empezar, es casi imposible detener la acción. 

Lo interesante del asunto es que quizá entender por completo el proceso que da origen al bostezo ayudaría a comprender mejor algunas enfermedades fuertemente relacionadas con la corteza primaria, como la demencia, el autismo, la epilepsia y el síndrome de Tourette, según los científicos del mencionado estudio.

En definitiva, cualquier pieza de información que permita entender la naturaleza de la corteza primariam así como los fenómenos que pueden alterarla, será de gran utilidad.

¿Sabías esto de los bostezos

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Gabriela Sulpizi

Gabriela Sulpizi Cocinera profesional y escritora.

Cocinera y escritora profesional. Me gusta brindar soluciones culinarias a paladares curiosos de la forma más sencilla y amistosa posible. Juntar dos de mis pasiones nunca fue tan fácil y tan entretenido.

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