En una ceremonia modesta en el Palacio del Elíseo, el electo presidente francés prometió "actuar sin descanso" por una nación "más fuerte". Además, su renombrado partido "Renacimiento" se prepara para los comicios legislativos de junio.
El reelecto presidente de Francia, Emmanuel Macron, asumió formalmente, hoy sábado, el cargo de primer mandatario de su país y se comprometió a trabajar "sin descanso" por una Francia "más independiente" y "más fuerte", durante el discurso de su investidura por otros 5 años de gestión gubernamental.
"Actuar sin descanso con un objetivo: ser una nación más independiente, vivir mejor y construir nuestras respuestas francesas y europeas a los desafíos de nuestro siglo", dijo Macron durante la ceremonia en el Palacio del Elíseo.
Además, prometió "unir y pacificar" Francia, así como "legar un planeta más habitable" y un país "más fuerte". Asimismo, refirió que él y Francia son "diferentes" que hace 5 años.
"Este pueblo nuevo, diferente de hace cinco años, confió a un presidente nuevo un mandato nuevo", aseguró.
La ceremonia de investidura se celebró en el salón de baile del Elíseo ante unos 450 invitados, entre ellos sus predecesores, el socialista François Hollande y el conservador Nicolas Sarkozy.
En los jardines del Elíseo, de pie, Macron, de 44 años, escuchó la salva de 21 cañonazos disparados desde la cercana explanada de los Inválidos, antes de escuchar "La Marsellesa", el himno nacional, y pasar revista a las tropas.
Su nuevo mandato comenzará oficialmente el 14 de mayo. Para esa ocasión, Macron busca nombrar un nuevo primer ministro, una elección que se anuncia compleja debido a la actual coyuntura electoral en su país.
Elecciones Legislativas
La juramentación de Macron llega a poco de las elecciones legislativas, programadas para junio, en las que buscará renovar su mayoría parlamentaria, algo no visto con simpatía por las mayorías, según revelan los sondeos de opinión previos.
A diferencia de 2017, su alianza de centro-derecha afrontará una extrema derecha fuerte, y un frente de izquierdas que busca impedir que Macron lleve a cabo polémicas reformas como el retraso de la edad de jubilación de 62 a 65 años.
"La elección presidencial no ha solucionado nada. Macron es un presidente sin mandato", refirió hoy el izquierdista Jean-Luc Mélenchon, líder de esta alianza al haber obtenido casi un 22% de votos en la primera vuelta de esos comicios.
Para que el reelecto mandatario pueda llevar a cabo su programa político, las elecciones legislativas del 12 y 19 de junio se anuncian claves. La oposición, que las considera una "tercera vuelta", ya está movilizada para impedírselo.
La Nueva Unión Popular Ecológica y Social, que aúna a la izquierda radical, ecologistas, comunistas y socialistas, lanzó este sábado su campaña para lograr una mayoría de diputados e imponer a Mélenchon, de 70 años, como primer ministro.
Pero este frente unido generó tensión en el seno del otrora gobernante Partido Socialista, algunos de cuyos miembros estudian presentarse a las elecciones contra candidatos de la alianza.
"Estos serán candidatos 'macronistas' porque solo servirán a Macron", advirtió Mélenchon, el líder de La Francia Insumisa (LFI).
De cara a atraer a los socialistas desilusionados con esta unión y reequilibrar su alianza de centroderecha, La República en Marcha (LREM) del presidente anunció cambiar de nombre a "Renacimiento".
Macron se convirtió, el 24 de abril pasado, en el primer mandatario en lograr la reelección en dos décadas tras derrotar de nuevo en el balotaje a la ultraderechista Marine Le Pen con un 58,55% de votos, unos 7,5 puntos menos de ventaja que en 2017.
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