Analista ecuatoriano advierte de "posibles complicidades de agentes del Estado" en asesinato de Fernando Villavicencio

Ecuador amaneció este jueves bajo estado de excepción por 60 días, una medida adoptada por el gobierno del presidente Guillermo Lasso luego del asesinato del candidato presidencial, Fernando Villavicencio (59), en un atentado en Quito que ha conmocionado al país norteño.

Villavicencio, quien tentaba la presidencia ecuatoriana con el Movimiento Construye, fue asesinado a tiros la tarde del miércoles 9 de agosto, al promediar las 06:20 p.m. (hora local), cuando salía de un mitin organizado en el colegio Anderson, en la capital ecuatoriana.

Hasta el momento, las fuerzas del orden han detenido a seis presuntos implicados en el ataque que dejó un saldo de nueve personas heridas, entre ellas una candidata a asambleísta y dos policías.

El Ministerio Público ecuatoriano, por su parte, dio cuenta del fallecimiento de uno de los sospechosos del atentado, tras ser abatido durante un tiroteo con el personal de seguridad de Villavicencio.

El crimen del también periodista y exasambleísta se produjo a 10 días de las elecciones generales extraordinarias, en un contexto en que el país padece ante el feroz crecimiento del crimen organizado.

La lucha contra la corrupción y las amenazas de grupos criminales 

Días antes de su asesinato, Fernando Villavicencio presentó una denuncia que salpicaba al exvicepresidente Jorge Glas, exministro del gobierno de Rafael Correa (2007-2017), y a Petroecuador por supuestas irregularidades en la adjudicación de 21 pozos petroleros a empresas extranjeras.

Así lo precisó esta mañana el analista político y director ejecutivo de “Fundamedios”, César Ricaurte, quien recordó que el fallecido candidato presidencial había sido un denunciante permanente de la corrupción, sobre todo en la gestión de Correa Delgado, exmandatario asilado en Bélgica y condenado en ausencia a ocho años de cárcel por el delito de cohecho pasivo agravado, en un caso que involucraba a empresas nacionales e internacionales como la brasileña Odebrecht.

“Las investigaciones de Fernando Villavicencio fueron las que desembocaron la acción de la justicia que llevó a la cárcel al presidente [Rafael Correa] y al exvicepresidente Jorge Glas, que fue liberado por jueces corruptos hace pocos meses”, relató en Ampliación de Noticias.

“En los últimos días había presentado una denuncia sobre una gigantesca trama de corrupción en el sector petrolero del país. Una trama de corrupción que volvía a juntar a Jorge Glas con altos funcionarios del gobierno de Lenin Moreno y de Guillermo Lasso”, agregó.

Ricaurte también señaló que, a inicio de agosto, el exasambleísta y los integrantes de su partido habían denunciado amenazas directas de grupos criminales como “Los Choneros” y su cabecilla Adolfo Macías, alias “Fito”.

“Había recibido amenazas directas del líder de otros de los grupos criminales, que son “Los Choneros”. Entonces, hay abundantes indicios de estos nexos entre grupos criminales con ciertos sectores políticos”, comentó.

Sin embargo, el director de “Fundamedios” indicó que no es preciso el video en el que los integrantes de la banda “Los Lobos” se atribuyen el magnicidio. “No ha sido corroborado. No tiene validez informativa”, indicó.

César Ricaurte indicó que, lastimosamente, el asesinato de Fernando Villavicencio demuestra el “poder inédito” y la escalada del crimen organizado vinculado a supuestas mafias políticas.

“La situación se ha desbordado, evidentemente las acciones del gobierno actual son insuficientes. Este magnicidio no puede quedar en la impunidad; sin embargo, hay evidencias de posibles complicidades de agentes del Estado en este crimen, y eso es algo que debe ser investigado a fondo”, aseveró.

Y es que Fernando Villavicencio era uno de los ocho candidatos que aspiraban a suceder a Guillermo Lasso en la Presidencia del Ecuador. La reciente encuesta de Cedatos lo posicionaba en el segundo lugar, detrás de la candidata correísta Luisa Gonzáles.