El hijo de Yolanda Gómez Cristóbal, quien permanece en estado crítico tras ser baleada en la puerta de su casa, en el distrito de San Juan de Lurigancho (SJL), señaló que no cuentan con los medios para cubrir los mas de 60 000 soles de deuda con la clínica donde su madre permanece internada.
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Familiares de Yolanda Gómez Cristóbal (63), quien resultó gravemente herida tras recibir un disparo durante un tiroteo ocurrido el pasado 13 de noviembre, en el distrito de San Juan de Lurigancho (SJL), piden ayuda para que sea trasladada a un hospital del Estado debido a que no pueden cubrir los costos de atención médica de la clínica en la que permanece internada.
Juan Luis González Gómez, hijo de la víctima, contó en RPP que su madre, luego del ataque, fue trasladada a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de la clínica San Juan Bautista y que a la fecha “se ha generado un gasto alrededor de 61 000 soles”.
“Pido a las autoridades, al Ministerio de Salud, EsSalud, para que puedan apoyarnos buscando una referencia para que mi madre pueda ser trasladada a un hospital nacional”, indicó.
Sobre el estado de salud de su madre, señaló que su vida depende de un respirador artificia, pues la bala afectó parte del pulmón y del hígado.
Los hechos
El tiroteo, donde fue herida Yolanda Gómez Cristóbal, sucedió el 13 de noviembre cuando dos hombres eran perseguidos por dos presuntos sicarios por el jirón Tumbes, en el sector Caja de Agua. Al llegar a la calle Ica, estas personas se refugiaron en la casa de la mujer de 63 años donde funcionaba un puesto de venta de comida al paso.
En ese momento, los presuntos sicarios sacaron sus armas y abrieron fuego contra la vivienda. Fueron auténticos momentos de terror para los vecinos y comensales del citado negocio, que solo atinaron a tirarse al suelo. Lamentablemente, Yolanda Gómez Cristóbal fue herida gravemente en la balacera.
“Estos cobardes, porque no puedo decir otra cosa, están metidos en ajuste de cuentas. Han pasado por mi casa y se metieron a mi negocio a esconderse. Eran dos a tres (sujetos), que los venían a matarlos a ellos”, refirió el hijo de la víctima.
En la escena del crimen, los peritos encontraron hasta siete casquillos de bala, mientras que en las paredes de la casa se observan los orificios de los disparos.
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