Tras la muerte del propietario, se generó un problema familiar que ha llegado hasta el Poder Judicial. Los ocupantes se niegan a abandonar el predio, aduciendo que este fue heredado fraudulentamente a una de las nietas del fallecido.
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Una familia se ha atrincherado en una casa de la urbanización Corporación, en el distrito limeño de El Agustino, para evitar ser desalojada. Los ocupantes han soldado las puertas y hasta han colocado una valla en el ingreso, para impedir que los saquen del predio.
Todo comenzó el año 2018, con el lamentable fallecimiento de Felipe Guillén Quispe, propietario de esta casa de 200 metros cuadrados.
Tras la muerte del patriarca de la familia; los herederos, entre ellos Maribel Guillén Cornejo, hija mayor de don Felipe, iniciaron los trámites para traspasar el predio.
Sin embargo, durante el proceso, se dieron con la sorpresa de que la casa había sido donada por el dueño a su nieta, Gisela Gonzales Guillén, a la sazón, hija de Maribel Guillén Cornejo.
Inicialmente, la joven intentó desalojar a su propia familia de la vivienda, pero no lo consiguió; por lo que, tiempo después, vendió la casa a una tercera persona, que también intentó sacarlos del predio.
Ante esta situación, esta persona revendió la casa a una cuarta persona, que inició un proceso en el Poder Judicial, que le terminó dando la razón y, por ello, pretende desalojar por la fuerza a los ocupantes.
Denuncian fraude
Un equipo de RPP Noticias llegó esta mañana a la casa en litigio, constatando que la puerta ha sido soldada y se ha colocado una valla metálica para impedir el paso. En el frontis, además, hay una bandera del Perú y afiches en los que se denuncia un supuesto fraude.
Maribel Guillén Cornejo aseguró que la Fiscalía de El Agustino ha iniciado una investigación, en la que se ha encontrado una presunta falsificación de documentos para la donación inicial.
Por ello, la familia ha decidido atrincherarse en la casa hasta que se esclarezca el caso.
“Permaneceré en estas condiciones hasta que la jueza resuelva mi caso, porque lo que estoy pidiendo es justicia. Lo que me están haciendo es una injusticia. Lamentablemente, (mi hija) está mal influenciada por el enamorado, hoy su esposo, por gente que le ha aconsejado mal. (...) Va a acabar mal ella con todo”, sostuvo Maribel Guillén Cornejo.
Los vecinos han mostrado su apoyo a los ocupantes, al punto que han hecho fuerza común cuando han llegado agentes de la Policía Nacional para intentar hacer efectivo el desalojo.
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Fernando Chuquillanqui Periodista
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