Alcaldesa de Surquillo tras cierre del Mercado N.°1: Se ha evidenciado "que hay grandes deficiencias en temas sanitarios"

Tras el cierre del Mercado N.º 1 de Surquillo y el reclamo de sus comerciantes, la alcaldesa del distrito, Cintia Loayza, precisó que esta medida responde a que la comuna busca "un cambio" en el mercado, tras evidenciar presuntas deficiencias en temas sanitarios y en la gestión de los comerciantes.

"Hemos evidenciado a todo el Perú de que hay grandes deficiencias en temas sanitarios y que la conducción de los comerciantes en los puestos no ha sido el mejor", dijo Loayza en Ampliación de Noticias.

La alcaldesa sostuvo que se han iniciado con trabajos para cambiar los sistemas sanitarios, eléctricos y de prevención de incendios, a fin de solucionar estos problemas para la reapertura del mercado. Las labores, según mencionó Loayza, podrían extenderse hasta por 180 días.

Agregó que, desde el inicio de su gestión, se ha buscado sensibilizar a los comerciantes de los 14 mercados en el distrito, después de constatar que "el 99 % de estos eran insalubres e informales".

"Hoy, el Mercado N.º 1 es conducido por 145 comerciantes en la primera planta del mercado, porque este tiene tres plantas, lo han venido usando de manera irregular, irresponsable, porque no tienen las condiciones. En este plan de fiscalización, hemos evidenciado desde el año pasado que la manipulación de los alimentos, las condiciones del sistema eléctrico, de pozo a tierra, no cumplían las condiciones", manifestó.

Medidas similares en otros mercados

La autoridad apuntó que medidas similares se tomaron en los mercados N.º 2 y González Prada, los cuales ya reabrieron; mientras que el mercado San Felipe se encuentra en proceso de remodelación y acondicionamiento.

Asimismo, aseguró que su gestión no pudo acreditar que los trabajadores del mercado N.º 1 hayan estado al día en sus pagos.

"Ellos no han acreditado fehacientemente pago alguno, que además es parte de la conducción que ellos tienen que acreditar como conductores. Sin perjuicio de ello, las condiciones sanitarias en las que hemos encontrado los puestos atentan contra la vida, el cuerpo, la salud de cualquier consumidor", refirió.

Loayza explicó que los comerciantes también administraban más de un puesto al interior del mercado, con algunos de ellos poseyendo hasta nueve espacios en el primer y segundo nivel del lugar.

Debido a los casi seis meses que el mercado quedaría inoperativo, la alcaldesa indicó que se les ha propuesto a los trabajadores formar parte de ferias itinerantes para que continúen con la venta de sus productos y seguir teniendo actividad económica durante dicho plazo.

"Esto no ha sido repentino. Ha sido comunicado, hemos tenido mesas de trabajo, de diálogo, el equipo técnico los ha asistido durante todo el año pasado y este año. Sin embargo, ellos se han resistido porque al interno tienen pugnas internas, tres grupos entre ellos, algunos de ellos quieren apoderarse de puestos que son bienes de dominio público porque este es un mercado municipal", precisó.