En una reciente entrevista, el protagonista de El Guardaespaldas recordó cómo fue su acercamiento con la Familia Real Británica.
Kevin Costner reveló un curioso secreto que el propio príncipe William decidió contárselo. El diálogo ocurrió quince años después de que el actor le ofreciera un papel cinematográfico a la princesa Diana, concretamente en la secuela de la popular película de 1992, El guardaespaldas (The Bodyguard).
En una entrevista con la revista People, la estrella de Hollywood, de 69 años, detalló las circunstancias y conversaciones que abordaron este proyecto cinematográfico que nunca se concretó. La oferta del papel a Lady Di fue posible gracias a la duquesa Sarah Ferguson, quien facilitó el contacto entre el actor y la princesa.
“Sarah fue muy amable. Siendo duquesa, podría haber dicho: ‘Bueno, yo también soy una princesa, ¿Qué hay de mí?’, pero no lo hizo. Me dijo: 'Voy a hacer que esto suceda, Kev'. Y así lo hizo. Siempre la respeté por no inmiscuirse", comentó Costner.
El protagonista de Danza con lobos reveló además que el primer borrador del guion se completó un día antes del trágico accidente automovilístico que en 1997 acabó con la vida de Diana de Gales a los 36 años.
"Iba a hacer una segunda parte de El guardaespaldas. Realmente estaba avanzando muy discretamente porque así es como opero. Mantengo las cosas en privado. Por eso, cuando finalmente surgió que la princesa Diana podría hacerlo, hablamos", recordó Kevin.
Kevin Coster y su reunión privada con el príncipe William
Años después, durante una visita a Inglaterra, Kevin Costner fue invitado a una reunión privada con el príncipe William. El actor describió así este encuentro: "Nos reunimos en una sala donde las sillas aún estaban apiladas. Sólo estábamos nosotros dos".
En medio de la conversación, William soltó una frase que Costner jamás olvidará: "¿Sabes? A mi madre le gustabas".
Ambos continuaron charlando durante aproximadamente media hora. Aunque el actor prefirió no revelar más detalles de la conversación, insistió en que fue una charla muy agradable.
"Simplemente conversamos y luego nos despedimos. Nunca nos convertimos en amigos por correspondencia ni nada parecido. Pero guardé un recuerdo muy grato de quién era él, de cómo me abordó y de lo que hablamos", señaló a la publicación.
Te recomendamos
La muerte de Lady Di: la semana de luto que vivió la monarquía británica
El 31 de agosto de 1997, la princesa Diana de Gales -también conocida como Lady Di- murió a la temprana edad de 36 años en un accidente de tráfico en París (Francia).
Durante la semana que precedió a su espectacular funeral, el Reino Unido se sumió en una efusión de dolor popular sin precedentes que sacudió a una monarquía que algunos vieron insensible.
Divorciada desde hacía un año del otrora príncipe Carlos, la princesa Diana y su adinerado nuevo amante, el empresario egipcio Dodi Fayed, sufrieron el acoso de la prensa durante sus vacaciones de verano en el Mediterráneo.
Ambos llegan a París la tarde del 30 de agosto y cenan esa noche en el hotel Ritz, propiedad de Mohamed al Fayed, padre del magnate. Intentan salir discretamente en un Mercedes por una puerta trasera poco después de medianoche.
Perseguido por paparazis en moto, el auto choca a gran velocidad contra una columna en un paso subterráneo cerca del puente del Alma, en la orilla norte del río Sena, opuesto a la torre Eiffel.
Fayed y su chófer, que presentaba un alto nivel de alcohol en la sangre, mueren al instante. Su guardaespaldas queda gravemente herido. Los socorristas consiguen sacar a la princesa Diana con vida.
Siete fotógrafos son detenidos. Las imágenes del accidente se ofrecen por fortunas a los periódicos.
Lady Di es trasladada al hospital Pitie-Salpetriere donde, después de dos horas de intervenciones quirúrgicas, muere a las cuatro de la mañana. La familia real es informada oficialmente del desafortunado hecho.
Te recomendamos
EP01 | T1 | La James Bond femenina: Modesty Blaise
Antes de que se rumoreara que James Bond pasaría a ser una espía mujer, esa espía mujer ya existía: se trata de la implacable Modesty Blaise, creada para los cómics a primeros de los años 60s por el guionista Peter O’Donnell y, tras su éxito en las viñetas, protagonista de numerosas novelas deliciosamente pulp. Tarantino homenajeó al personaje en su filme Pulp Fiction y llegó a producir una adaptación al cine. Hablaremos de todas las diferencias, que son muchas, entre la progresista Modesty Blaise y el reaccionario agente 007. Para ello contaremos con la participación del autor de la novela Chicas Bond, el periodista y escritor Enrique Planas.
Comparte esta noticia
Siguenos en