El manga y el anime (nombre con los que se conoce a la historieta y animación de origen japonés) tiene muchas características que los distinguen claramente sobre otras formas de ficción occidental. Una de las mas saltantes es la especialización de los géneros. En Japón prácticamente hay manga para todos los públicos objetivos y en virtud de eso hace muchos apareció un género que con el tiempo se volvió muy popular: el yaoi.Yaoi es la contracción de la frase YAma nashi, Ochi nashi, Imi nashi, que literalmente se traduce como “sin clímax, sin desenlace sin sentido” (todo esto dentro de la tradición occidental de adoptar términos originalmente despectivos que cambian su sentido para referirse a géneros o aficiones) y se refiere al genero de manga y anime que trata de relaciones homosexuales. Este, junto con el Shonen-Ai (literalmente “amor entre chicos”), muestran relaciones románticas entre hombres, en formas generalmente sublimadas y estereotipadas. La diferencia entre Shonen-Ai y Yaoi es que el primero es más sugerente mientras que el segundo es totalmente explícito.Lo curioso es que estos géneros son, desde su origen en los años setenta, dirigidos principalmente a chicas heterosexuales y se enmarcan dentro del gran género Shōjo que justamente tiene como público objetivo a las adolescentes.El origen del género se remonta a la década de 1970, cuando comenzaron a aparecer las obras que se convirtieron en la gran cantera para el Yaoi: los dōjinshi. El término dōjinshi se refiere a los mangas realizados por fans (o fan fiction) donde se crean historias que complementan o cambian los relatos oficiales. Muchos de estos dōjinshi creaban historias en las que personajes masculinos desarrollaban relaciones románticas entre ellos. Muchos artistas y escritores famosos del mundo del manga iniciaron sus carreras haciendo dōjinshi, como las consagradas CLAMP (colectivo que firma obras tan importantes como Card Captor Sakura, Magic Knight Rayearth, X y Chobits).Con el tiempo, comenzaron a aparecer las primeras obras originales enmarcadas en el yaoi y shonen-ai como Tooma no Shinzo, Patalliro!, Kaze to Ki no Uta y Earthian, además de la abundancia de elementos de estos géneros en historias shojo súmamente populares como Sailor Moon. Es importante conocer también un concepto muy utilizado en distintos géneros de manga y anime japonés, el bishōnen (literalmente, “chicos hermosos”), que se refiere a personajes masculinos físicamente bellos y con rasgos andróginos. La presencia de personajes bishōnen, independientemente de su orientación sexual, no convierten a la obra necesariamente en un yaoi (como el caso del personaje Kurama, en el famoso manga y anime YuYu Hakusho o con la entrañable pareja formada por Yukito y Touya en Card Captor Sakura).Paralelamente al yaoi, pero distintas en cuanto a público objetivo, existe el género Yuri, que cuenta historias de amor entre chicas.Para el público objetivo principal de estas historias, las pasiones que estas despiertan tienen diferentes naturalezas. En una sociedad Japonesa, con una presión social muy particular frente a la occidental: “la alta tasa de soltería hace que muchas mujeres que se dedican al trabajo no tengan tiempo para una relación”, explica Fiorella Cabrejos, aficionada al shonen ai y dueña de una tienda de ropa y accesorios en el Centro Comercial Arenales que vivió un tiempo en Japón. “El ver a dos hombres hermosos amándose hace que dejen de sentirse insignificantes para un hombre, mientras que una protagonista mujer, hermosa y exitosa las haría sentirse menos. Ver a dos hombre demostrándose amor hace que ellas se sientan por el contrario, más llenas y sin prejuicios hacia ellas mismas.”En cambio, el atractivo para el público occidental es otro: “Es definitvivamente la falta de romanticismo de los occidentales, lo prohibido, y también llegamos al mismo punto en que se prefiere ver la historia de amor de dos hombres para no hacer la comparación con la protagonista y no sentirse ‘menos’”, opina Cabrejos. Sin embargo, la idea va un poco más lejos, en cuanto a la identificación del lector con los personajes: “Ves la historia como testigo, pero no eres parte de ella como pasaría en una novela, donde toca ponerse en los zapatos de la protagonista y comprometerse con la historia de una forma más personal”En este sentido, también ha sido criticada la representación que se hace de las relaciones homosexuales: el consumo de estos mangas homoeróticos por parte de un público principalmente femenino tanto en Japón como en el extranjero, ha sido interpretado como un movimiento que reconstruye patrones heteronormativos para adaptarlos a los propios gustos e intereses de estas mujeres, escribió la investigadora colombiana Alexandra Chocontá en su investigación Manga yaoi y Fujoshis : exploración de la propia voz del deseo como alternativa al gobierno de la sexualidad juvenil, publicada por la Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá, Colombia.En el argot de los fanáticos del anime y el manga, se utiliza el término “fuyoshi” para nombrar a las chicas fanáticas del yaoi y “fudanshi” para mencionar a fans del género másculino. Estos aficionados son diversos en cuanto a su orientación sexual, por lo que ser fuyoshi o fudanshi no quiere decir necesariamente que se trate de personas LGTBIQ. Es importante tener en cuenta también que los temas LGTBIQ se tratan de manera muy distinta en Japón que en occidente, y los medios japoneses suelen ser bastante abiertos en la representación de temas de orientación sexual.En suma, el yaoi es uno de los generos más populares de manga y anime en todo el mundo, con un mercado inmenso entre autores profesionales y aficionados y una legión de seguidores que aman estas historias idealizadas de amor entre hombres. La representación LGTBIQ en el yaoi no será la más fiel ni la mas diversa ante el enorme matiz de la realidad, pero durante décadas ha sido clave para la visibilización de una parte de la cultura queer en el mundo.Obras clave para el Yaoi / Shonen AiFiorella nos recomienda algunas obras para iniciarse en este género:Gravitation: Shūichi Shindō busca dos cosas, el éxito con su banda, Bad Luck y el amor del escritor Eiri Yuki.Bronce: La trágica relación entre Koji, un famoso cantante e Izumi un futbolista.Zetsuai 1989: Precuela de Bronce, cuenta como se inicia la relación entre Izumi y Koji.Loveless: Historia de fantasía y magia, que cuenta la búsqueda de venganza de Ritsuka Aoyagi por la muerte de su hermano y su relación con el antiguo compañero de este.Yuri on Ice: La competitiva escena del patinaje sobre hielo ve nacer el amor entre un deportista y su ídolo.Japón Cool es el espacio en RPP.pe en el que compartimos, acercamos y tratamos de explicar diversos aspectos de la increíble, compleja y fascinante cultura popular japonesa. 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