Ley de cine: ¿cómo funciona y qué mejoras necesita para seguir promoviendo la industria peruana?

La Ley de Cine vigente se promulgó en el 2019 con el afán de promover la industria cinematográfica y audiovisual. Desde ese entonces el cine peruano -y sobre todo- el cine regional se ha consolidado y ha ido ganando reconocimiento internacional, afirman cineastas consultados por RPP Data para este informe. Todos coinciden en que hay mejoras que realizar a la ley actual; sin embargo, las que propone la congresista Adriana Tudela en su proyecto de ley no son las necesarias.

"La ley actual promociona la industria nacional y ha permitido el florecimiento del cine regional. Algunas de las películas más importantes del cine peruano proceden justamente de las regiones. Si esta ley se pusiera en entredicho, serían ellas quienes se perjudicarían más", sostiene el director y productor de cine Joel Calero.

Pero la ley actual no solo habla del desarrollo de películas, sino también de la promoción de otras artes como las escénicas o literarias, agrega el director de 'La Última Tarde'. Así, promueve la creación de festivales, espacios de distribución alternativa o la formación para técnicos audiovisuales, por ejemplo.

En esa línea, el abogado especializado en derecho audiovisual Michel Salazar recuerda que la Ley de Cine fue una medida que el gobierno de Martín Vizcarra consideró urgente para amortiguar la desaceleración de la audiencia [en ese entonces]. "La ley de cine buscó regular y establecer un marco de fomento y protección para todo el sector cinematográfico, abordar la distribución y crear un sistema de información audiovisual", detalla.

La controversia de los estímulos económicos 

Para iniciar la producción de una película es casi indispensable que el país de origen, en este caso el Perú, otorgue financiamiento a sus realizadores, explica Carolina Denegri, productora cinematográfica de filmes como 'N.N.' y 'La última noticia'. Sobre todo porque ese dinero, afirma, sirve luego para que estos proyectos nacionales continúen postulando a fondos extranjeros y completen el presupuesto que necesitan en un proceso que puede llevar entre 6 y 10 años entre el inicio de la escritura del filme hasta su estreno comercial y distribución, pasando por su proyección por festivales nacionales e internacionales.  

Según la normativa vigente, los fondos se entregan mediante diversos concursos dependiendo el género de la película. "El concurso más popular es el de ficción, que cuenta con alrededor de 100 participantes. Los finalistas llegan a ser entre 10 a 12, de los cuales solo ganan seis proyectos y quedan fuera muchísimos otros", detalla Denegri.

Un apunte importante que realizan ambos cineastas a RPP Data es que este premio de financiamiento, otorgado por el Ministerio de Cultura a través de la Dirección del Audiovisual, la Fonografía y los Nuevos Medios (DAFO), no representa el 100% del costo de la película, como ha mencionado la congresista Adriana Tudela. "[El monto asignado] depende de la sustentación de cada proyecto. Hay que presentar una serie de documentos y presupuestos detallados, y dependerá finalmente del jurado cuánto financiamiento deciden otorgar", explica la productora Denegri.

El cineasta Calero, por ejemplo, cuenta que su más reciente película 'La piel más temida', que se estrenará en el 2024, obtuvo el premio de la DAFO. "Es un premio parcial, con el que estamos financiando el 65% del costo de la película. Otros porcentajes vienen de Ibermedia, un organismo de cooperación iberoamericana, [otro] de una empresa colombiana, [otro] de mi propia empresa y de crowfunding [una estrategia colaborativa para conseguir fondos en línea]", enumera. 

Estos estímulos económicos, además, no solo permiten el rodaje de películas, si no que incentivan la investigación, la preservación de la memoria audiovisual y el apoyo a festivales, agrega el abogado Michel Salazar.

Mejoras en la distribución y exhibición de películas 

Una de las mejoras más urgentes en las que sí se necesita mejorar en la ley actual tiene que ver con la distribución y exhibición de películas, opina Carolina Denegri. "Se necesita una política de parte del gobierno que entienda el proceso de hacer una película. Actualmente, a pesar de que existen estímulos para la distribución -que son muy necesarios-, muchas películas duran en cartelera solo [pocos] días, y no por responsabilidad de los realizadores, sino por responsabilidad del Gobierno", sostiene.

Otro de los aspectos a mejorar tiene que ver con el aumento de recursos económicos para producir más y en mejores condiciones, agrega Calero. "Con más recursos generamos mayor dinamismo en la economía, porque contratamos personal, técnicos, hospedaje... sin embargo, [la económica] no debe ser la única mirada que se tenga del cine peruano. La promoción de la cultura no debe ser medida con los estándares económicos de ninguna manera", finaliza.