Pagan impresionante cifra por la puerta que se utilizó en la dramática escena de Jack y Rose en 'Titanic'

La puerta de madera a la que se aferran Rose (Kate Winslet) y Jack (Leonardo DiCaprio) en la escena final de la película Titanic fue vendida por 718.750 dólares en una subasta de la casa Heritage Auctions, en Estados Unidos. El pedazo de madera superó a otros icónicos objetos cinematográficos, como el látigo de Indiana Jones en El templo de la perdición y el hacha de Jack Nicholson en El Resplandor.

Desde el estreno de la película de James Cameron en 1997, dicho trozo de madera generó controversia tras abrirse un debate sobre si el objeto pudo haber soportado el peso de ambos protagonistas, ya que el personaje de DiCaprio acaba muriendo congelado al no mantenerse sobre la plataforma.

Según The Hollywood Reporter, el vestido de gasa que Winslet lució durante la escena final de la película, también se vendió en la subasta por 125.000 dólares.

Más objetos que se vendieron en la subasta

Otros objetos vendidos en esta subasta fueron el látigo que llevaba el actor Harrison Ford en una de las películas en las que dio vida a Indiana Jones por 525.000 dólares o la copa del Santo Grial utilizada por el mismo personaje en Indiana Jones y la última cruzada por 87.500 dólares.

Había más de 1.600 objetos de la historia del cine propiedad de la cadena de restaurantes Planet Hollywood disponibles en esta puja, desde bocetos de diseños y espadas de utilería, hasta la chaqueta de cuero del intérprete Arnold Schwarzenegger en Terminator 2.

También especificaron que gran parte de ellos pertenecían a éxitos cinematográficos de las décadas de 1980, 1990 y 2000.

James Cameron admite que Jack pudo haber sobrevivido en Titanic

La polémica en torno a la muerte de 'Jack' es solo un ejemplo de cómo la historia del Titanic "parece no tener fin para el público", dijo Cameron en un especial de National Geographic por los 25 años del filme.

En el documental, el cineasta puso a prueba el sacrificio del protagonista con experimentos que se llevaron a cabo en un tanque de agua helada, con dos dobles y una réplica exacta de la puerta utilizada para el rodaje.

Las personas que asumieron los roles de Jack y Rose fueron equipados con varios instrumentos de medición.

Los resultados de una prueba concluyeron que si Jack seguía aferrado a la puerta sin subirse a ella, habría perdido la vida por hipotermia. Otro experimento concluyó que la pareja pudo flotar y mantener el equilibro sobre el trozo de madera con sus cuerpos fuera del agua.

En este último escenario, "los portagonistas podrían haber aguantado hasta que llegara el bote salvavidas", admitió Cameron. "¿Veredicto final? Jack posiblemente podría haber sobrevivido. Pero hay muchas variables", añadió.