Hace un año, la NASA reveló las primeras fotografías obtenidas por el telescopio James Webb. Con 12 meses haciendo ciencia, las expectativas por el resto de la misión son muy altas y el equipo celebra una nueva etapa con más capturas de nuestro universo.
Exactamente un año atrás, el telescopio espacial James Webb ofrecía sus primeras imágenes de nuestro vasto universo. Ahora, como forma de celebración a tremendo inicio de operaciones, la NASA nos regala otra espectacular captura.
La imagen nos revela el nacimiento de estrellas similares a nuestro Sol a solo 390 años luz de distancia de nuestro planeta, en la región de formación más cercana a nuestra ubicación en el cosmos.
Te recomendamos
Nacimiento de estrellas
Los protagonistas de la imagen, situada en la nube de gas Rho Ophiuchi, son 50 estrellas en formación, con un tamaño similar a la de nuestro sistema.
De acuerdo con Klaus Pontoppidan, responsable del programa de ciencias del James Webb, la fotografía revela que las estrellas existen desde “hace un periodo muy breve de tiempo”, un ciclo que nuestro Sol pasó hace millones de años.
"Están sucediendo muchas cosas en esta imagen espectacular, ya que las estrellas jóvenes salpican de colores vibrantes las nubes de gas y polvo de las que nacen", comentó el profesor Mark McCaughrean, asesor principal de ciencia y exploración de la Agencia Espacial Europea (ESA).
Gran parte de la emisión de color rojo brillante proviene de chorros de gas molecular que fluyen a alta velocidad desde una protoestrella invisible, VLA1623, “una estrella tan joven que muchas pinturas rupestres de la Edad de Piedra son anteriores”, añade.
Pero sí hay una estrella masiva en la imagen: es S1, la cual se encuentra en la mitad inferior de ella.
La misma imagen del James Webb fue tomada años atrás con el telescopio Spitzer. Las diferencias son notorias y se debe al tamaño de su espejo: aunque ambos pueden tomar fotografías a nivel infrarrojo, el espejo del Webb mide 6,5 metros, mientras el de Spitzer solo era de 85 cm.
Un año de ciencias
Las primeras cinco imágenes del James Webb fueron revolucionarias para la ciencia.
La primera, que en realidad se presentó un día atrás, un 11 de julio, fue brindada por el propio presidente Joe Biden y reflejaba al cúmulo de galaxias SMACS 0732 de hace 4600 millones de años atrás.
En aquella imagen, estudiada hasta la fecha, se encontró a las primeras galaxias formadas luego del Big Bang, incluso a solo 13 500 millones de años.
James Web fue lanzado el 25 de diciembre de 2021, pero los ingenieros necesitaron seis meses para configurar sus herramientas científicas y el sistema con el que se conectaría a nuestro planeta.
“En solo un año, el telescopio espacial James Webb ha transformado la visión del cosmos de la humanidad, observando las nubes de polvo y viendo la luz desde rincones lejanos del universo por primera vez”, señala en un comunicado el administrador de la NASA, Bill Nelson.
Para él, “cada nueva imagen es un nuevo descubrimiento, que permite a los científicos de todo el mundo hacer y responder preguntas que antes nunca podrían soñar”.
James Webb se enfoca en explorar el universo joven, solo con cientos de años después del Big Bang. También investiga sobre exoplanetas, además del ciclo de las estrellas.
Hemos podido apreciar imágenes de los Pilares de la Creación, enormes estructuras de gas y polvo llenas de estrellas en nacimiento a 6500 años luz de nuestro planeta. También hemos logrado capturas de nuestros vecinos Júpiter, Saturno, Neptuno y Urano, de quien muchos descubrieron gracias a sus fotografías que también poseía anillos.
Las observaciones de Webb ya han dado lugar a cientos de artículos científicos que responden a preguntas de larga data y plantean otras nuevas para abordar con este observatorio.
“Con un año de exploración científica en nuestro haber, sabemos exactamente lo poderoso que es este telescopio, y hemos proporcionado un año de datos y descubrimientos espectaculares”, dijo Jane Rigby, científica principal del proyecto Webb en el Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA. “Hemos seleccionado un ambicioso conjunto de observaciones para el segundo año, que se basa en todo lo que hemos aprendido hasta ahora. La misión científica de James Webb apenas está comenzando y queda mucho más por venir”.
Te recomendamos
Comparte esta noticia
Siguenos en